101.299 bares aún tienen tragaperras: 1,2 millones de jugadores, 11,2 euros de media por partida y el domingo el día con menos clientes

fuente: elmundo.es

Prohibidas hasta 1981, lejos de desaparecer, siguen muy vigentes. El 62% de los bares tiene una y hay 182.397 en España, una por cada 270 habitantes

Paisaje acústico de un bar típico español: el gorgoteo de la máquina del café, el tintineo de los hielos cayendo en los vasos, las conversaciones superpuestas y en voz más bien alta, quizás el murmullo de un televisor de fondo y muy probablemente -hay un 61,8% de posibilidades- las melodías electrónicas y el clic-clic-clic de las monedas cayendo -si ha habido suerte- de una máquina tragaperras.

Eso al menos se desprende de la recientemente publicada Memoria de Actividad del Juego en España 2024, elaborada por la Dirección General del Juego, dependiente del Ministerio de Derechos Sociales, Consumo y Agenda 2030. Según este informe, en España hay 101.299 bares con tragaperras, oficialmente denominadas "máquinas b".

Del cruce de la cifra con el del número de bares en todo el país según el INE -163.890- se obtiene el dato mencionado de que el 61,8% tiene una. Y algunos disponen de varias, ya que son 153.286 las tragaperras repartidas en establecimientos de hostelería. La cifra total asciende a 182.397 máquinas -las hay también en casinos-, lo que supone una por cada 270 habitantes.

Con el auge de las apuestas online, esta modalidad de juego -inventada en 1887 en EE UU por Charles Fey- podría parecer obsoleta, pero, según recoge la memoria, el número de tragaperras en bares ha experimentado un ligero repunte. Tras desaparecer 8.671 de 2021 a 2022 -pasaron de 162.847 a 144.615-, aumentaron en 8.244 en 2023 y en 427 al año siguiente.

Muy lejos en cualquier caso de las cifras de 1981, cuando fueron legalizadas en España tras estar prohibidas durante la dictadura, como los casinos y la mayoría de juegos de azar. Si en su año de estreno había 200.000 instaladas -según recoge la prensa de la época-, al iniciarse 1982 eran ya el doble.

El aumento actual probablemente se explique por la ligera subida del número de bares en el último año -399 más de 2023 a 2024- tras un periodo de muchos cierres como consecuencia de la pandemia del Covid. Si ahora hay 163.890, en 2020 eran 182.595, según datos del INE.

El ránking por comunidades autónomas lo encabeza Andalucía, con 16.109 bares con tragaperras -casi el doble que Madrid, que cuenta con 8.670-, seguida de Cataluña (15.502), la Comunidad Valenciana (10.448) y Castilla y León (9.834).

No se detiene la Memoria de la Actividad del Juego en España 2024 en cuantificar el número de jugadores de tragaperras o el perfil de los mismos pero sí lo hace el estudio Juego y Sociedad, que CeJuego (Consejo Empresarial del Juego) y el Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) realizan anualmente.

En la última entrega (2024), cifran en 1,2 millones las personas que durante 2023 han echado alguna moneda a una de estas máquinas en base a la encuesta que realizan, en la que el 3,5% de los preguntados dice haberlo hecho. En 2019 eran el 4,4%.

"Cabe pensar que, como en el caso de las apuestas, la presión social lleva a que parte de quienes juegan en estas máquinas lo oculten", se lee en el estudio, apuntando que el número de jugadores podría ser mayor.

Un tercio de ellos -unos 400.000- juegan a las tragaperras con frecuencia mientras que el resto lo hace alguna vez. "Seguramente, estos últimos se limitan a echar alguna moneda de las vueltas de las consumiciones para probar suerte, cada vez menos frecuentes por la irrupción del dinero electrónico a través de móviles y tarjetas", recoge el informe.

Ocho de cada diez son hombres (el 79,6% por un 20,4% de mujeres) mayoritariamente españoles (91,4%). Respecto a la edad, un 24,3% tiene de 35 a 49 años, un 23,3% de 18 a 24 y un 21,4% de 25 a 34 años. El alto porcentaje de jóvenes lo matiza el informe explicando que entre los menores de 34 años el juego es muy esporádico.

"Los clientes habituales son mayores de 35 años", concluye. Sobre el estatus social abundan los que se declaran de clase media -el 32% media-media, el 23,9% media baja y el 23,8% media alta- frente al 12,2% de nivel alto y el 7,9% de estatus bajo.

JUGARSE LAS VUELTAS

Ahonda el informe en la forma en la que se juega a las tragaperras recogiendo los datos de un estudio basado en el análisis del comportamiento de 324 usuarios mientras echaban monedas a las máquinas: "Los observadores anotaban si el cliente había hecho alguna consumición, el tiempo dedicado a jugar y las cantidades introducidas en la máquina".

El 40,5%, se concluyó, sólo juega las vueltas de las consumiciones, o sea, cantidades muy pequeñas: un 35,2% juega menos de dos euros y el 19,8% de 2 a 5 euros. En el extremo opuesto, el 7,4% juega de 21 a 50 euros y el 5,7% más de 50 euros. El gasto medio es de 11,2 euros. Las cantidades jugadas incluyen el "rejuego", es decir la vuelta a la máquina de las monedas ganadas.

Casi la mitad (42,9%) juega durante menos de cinco minutos, "lo que equivale a echar unas pocas monedas a la salida del local o durante la consumición", y el 75,9% destina menos de 15 minutos. El tiempo medio de juego es de 12,2 minutos.

Un dato curioso incluido en Juego y Sociedad es el tiempo en que las tragaperras están en funcionamiento, cifra obtenida tras el seguimiento, en 2019, de 20 máquinas de 20 bares durante 468 días. Estuvieron "encendidas" una media de 13,11 horas al día pero sólo fueron usadas durante 43,2 minutos.

El día que menos se juega a la tragaperras es el domingo y el que más el viernes, seguido del sábado y el lunes. Una jornada prototípica de una tragaperras comienza a las 06.00 horas. En las cuatro horas siguientes -hasta las 10.00- se producen el 16,3% de las partidas que corresponden a quienes "inician su actividad a primera hora y aprovechan para desayunar en bares conocidos: construcción, transporte, limpieza, etc., así como servicios administrativos madrugadores", recoge el estudio.

Le toman el relevo, a las horas del café de media mañana y del aperitivo (18,1% de las partidas), "la clase media de servicios administrativos". Entre las 14.00 y las 17.00 horas, el momento de probar suerte con las vueltas de las consumiciones, ser producen el 25,6% de las partidas.

La franja que va de las 18.00 a las 20.00 horas acumula el 18,7% mientras que en la última hasta el cierre, desde las 20.00 horas hasta la 01.00 horas aproximadamente, se producen el 21,3% de las partidas del día.