Sintonía con Garzón
Hay un tercer actor institucional que también cuenta con una cuota de protagonismo. Se trata del ministro de Consumo, Alberto Garzón, que la semana pasada se reunió con el alcalde de Málaga, Francisco De la Torre, en la sede del Ayuntamiento. Aunque no lo manifestaron públicamente, ambos mostraron una clara sintonía en este asunto. El Ministerio celebra que haya ayuntamientos que están modificando su plan de usos del suelo para impedir la apertura de nuevas casas de apuestas. Argumentan que defienden "la salud pública y por la protección de los sectores más vulnerables de la población, incluidos los menores de edad. Existe una alarma social justificada por las patologías derivadas del juego problemático y, en ese sentido, necesitamos la complicidad de todas las administraciones en la tarea”, indicaron a El Confidencial fuentes oficiales de Consumo.
El Ayuntamiento de Barcelona ya aprobó el pasado mes de diciembre modificar su plan de usos del suelo para impedir la apertura de nuevas casas de apuestas. En su nuevo PGOU impulsará que los locales de juego se encuentren como mínimo a una distancia de 800 metros de un centro educativo y a 450 metros de equipamientos municipales y de salud.
El alcalde de Cádiz, José María González ‘Kichi’, aprobó el pasado mes de septiembre una limitación en las casas de apuestas de la capital gaditana. El Ayuntamiento de Sevilla también impulsó hace un año una moratoria en la aperturas de estos locales. Garzón respalda estas iniciativas que no solo proceden de los partidos de izquierda. Además del de Málaga, los ayuntamientos de Tomares (Sevilla), el municipio más rico de Andalucía, y el de Córdoba, ambos regidos por el PP, han iniciado trámites para cambiar sus normas urbanísticas.
Alejandro Torre, 23 años, relató a El Confidencial su historia de ludópata y cómo salió del infierno. Hoy ayuda a otros jóvenes
La Junta tiene la última palabra y anunció el pasado mes de febrero que limitaba las próximas aperturas de casas de apuestas a 150 metros de los centros educativos. Esta medida formará parte del próximo decreto autonómico. Alejandro Torre, estudiante de Periodismo y promotor de la plataforma Málaga contra las Casas de Apuestas, ya relató hace un año su historia a El Confidencial como ludópata y cómo salió del infierno.
Nadie mejor que él para mostrar una realidad muy dura en negocios a los que “no les hace falta hacer estudios de mercado porque saben a quién dirigirse”, apunta Torre. Este año cumple 24 y empezó a jugar a los 16. Lleva dos años en rehabilitación y es voluntario en la asociación Amalajer. Y espera que la normativa se ponga en marcha y que salve a otros jóvenes. Aquí no queremos casa de apuestas.
Sintonía con Garzón
Hay un tercer actor institucional que también cuenta con una cuota de protagonismo. Se trata del ministro de Consumo, Alberto Garzón, que la semana pasada se reunió con el alcalde de Málaga, Francisco De la Torre, en la sede del Ayuntamiento. Aunque no lo manifestaron públicamente, ambos mostraron una clara sintonía en este asunto. El Ministerio celebra que haya ayuntamientos que están modificando su plan de usos del suelo para impedir la apertura de nuevas casas de apuestas. Argumentan que defienden "la salud pública y por la protección de los sectores más vulnerables de la población, incluidos los menores de edad. Existe una alarma social justificada por las patologías derivadas del juego problemático y, en ese sentido, necesitamos la complicidad de todas las administraciones en la tarea”, indicaron a El Confidencial fuentes oficiales de Consumo.
El Ayuntamiento de Barcelona ya aprobó el pasado mes de diciembre modificar su plan de usos del suelo para impedir la apertura de nuevas casas de apuestas. En su nuevo PGOU impulsará que los locales de juego se encuentren como mínimo a una distancia de 800 metros de un centro educativo y a 450 metros de equipamientos municipales y de salud.
El alcalde de Cádiz, José María González ‘Kichi’, aprobó el pasado mes de septiembre una limitación en las casas de apuestas de la capital gaditana. El Ayuntamiento de Sevilla también impulsó hace un año una moratoria en la aperturas de estos locales. Garzón respalda estas iniciativas que no solo proceden de los partidos de izquierda. Además del de Málaga, los ayuntamientos de Tomares (Sevilla), el municipio más rico de Andalucía, y el de Córdoba, ambos regidos por el PP, han iniciado trámites para cambiar sus normas urbanísticas.
Alejandro Torre, 23 años, relató a El Confidencial su historia de ludópata y cómo salió del infierno. Hoy ayuda a otros jóvenes
La Junta tiene la última palabra y anunció el pasado mes de febrero que limitaba las próximas aperturas de casas de apuestas a 150 metros de los centros educativos. Esta medida formará parte del próximo decreto autonómico. Alejandro Torre, estudiante de Periodismo y promotor de la plataforma Málaga contra las Casas de Apuestas, ya relató hace un año su historia a El Confidencial como ludópata y cómo salió del infierno.
Nadie mejor que él para mostrar una realidad muy dura en negocios a los que “no les hace falta hacer estudios de mercado porque saben a quién dirigirse”, apunta Torre. Este año cumple 24 y empezó a jugar a los 16. Lleva dos años en rehabilitación y es voluntario en la asociación Amalajer. Y espera que la normativa se ponga en marcha y que salve a otros jóvenes. Aquí no queremos casa de apuestas.