A juicio del magistrado, la tablet o el móvil se han convertido en «niñeras» que parecen muy baratas, pero que a la larga salen muy caras, pues «son muchos los padres les dan a sus hijos estos instrumentos para que les dejen tranquilos sin entender que son instrumentos muy peligrosos para cometer actos delictivos, como amenazas, chantajes, coacciones o bullying, y muy peligrosos para ser víctima».
Calatayud ha explicado a los padres que «se están tomando medidas de alejamiento por casos de acoso entre menores». Un tipo de medidas que hace relativamente poco tiempo era impensable aplicar en el entorno de los menores, pero que ahora se han vuelto imprescindibles.
Para el juez de Menores de Granada, muchos de estos problemas se arreglarían con algo tan sencillo como «quitarnos los complejos de joven democracia, en la que todo son derechos, pero sin obligaciones y aprender a decir no a nuestros hijos».
A juicio del magistrado, la tablet o el móvil se han convertido en «niñeras» que parecen muy baratas, pero que a la larga salen muy caras, pues «son muchos los padres les dan a sus hijos estos instrumentos para que les dejen tranquilos sin entender que son instrumentos muy peligrosos para cometer actos delictivos, como amenazas, chantajes, coacciones o bullying, y muy peligrosos para ser víctima».
Calatayud ha explicado a los padres que «se están tomando medidas de alejamiento por casos de acoso entre menores». Un tipo de medidas que hace relativamente poco tiempo era impensable aplicar en el entorno de los menores, pero que ahora se han vuelto imprescindibles.
Para el juez de Menores de Granada, muchos de estos problemas se arreglarían con algo tan sencillo como «quitarnos los complejos de joven democracia, en la que todo son derechos, pero sin obligaciones y aprender a decir no a nuestros hijos».